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Termosifon
Para que funcione, hay que instalar una placa solar en el tejado. Esa placa está conectada a un circuito cerrado con un desnivel. En una instalación de placas solares térmicas por termosifón el sol calienta el agua que está dentro del panel solar. La placa se coloca de manera que caliente el punto más bajo del circuito. Al pesar menos el agua caliente que la fría, flota hasta el punto más alto del circuito cerrado.
Ese punto cerrado está en contacto con el acumulador y cuando el agua caliente flota hacia él, le transmite el calor del sol. El acumulador está conectado a un circuito de agua abierto que se almacena dentro del acumulador. Cuando se transmite el calor del agua del circuito cerrado al acumulador, este a su vez lo transmite al agua de su interior. Y esa agua es el que fluye hacia los grifos y la ducha.
Sistema solar integrado deposito y placa juntos
Sistema solar integrado, captador solar y acumulador en el que, además de un rendimiento excepcional, el diseño del producto, simplificado dentro de una estética moderna e innovadora. Único: Diseño exclusivo. Forma, función y materiales crean un producto perfecto y equilibrado. Flexibilidad: Sobre tejado plano, inclinado o directamente en el suelo, el equipo se adapta perfectamente a las condiciones constructivas existentes. Ahorro: Hasta un 20% más de eficiencia que los sistemas de termosifón convencionales. Principio de funcionamiento tan sencillo como genial: el agua se calienta y se acumula directamente en el captador solar. El hecho de que el fluido captador y el fluido de consumo sea el mismo tiene dos importantes ventajas: no se producen pérdidas por transmisión y no es necesaria la circulación continuada para su calentamiento. De este modo, incluso la más baja radiación solar se puede transformar en calor y se puede aprovechar de manera eficiente. La revolución en el mercado solar el sistema integrado: captador + acumulador , convence por su compacidad, sencillez, rentabilidad y exquisito diseño.
Forzado
Se trata de dos circuitos cerrados con un intercambiador de calor. En el circuito primario, el fluido caloportador frío pasa por los paneles solares. La radiación del Sol lo calienta y se dirige a un intercambiador de calor donde cede energía térmica al circuito secundario. A continuación, vuelve a repetir el ciclo.